Sandry Sanz nació en 1978. Desde muy pequeña demostró su don para cantar y con sólo 2 años entonaba perfectamente canciones de su infancia. En el coro del colegio religioso donde estudió fue elegida solista por destacar entre los demás alumnos. En su adolescencia participó en varios discos de congregaciones religiosas degustando el mundo de la grabación en estudio, aportando ideas de coros e incluso en la base musical.   Con 19 años, a la vez que estudiaba, comenzó a trabajar en fiestas y eventos adquiriendo más experiencia del mundo de la música en vivo. A los 26 años dejó de trabajar en la música y se centró en su profesión y en su familia pero jamás ha dejado de cantar y probar nuevos estilos musicales porque nunca se niega a aprender. Por este motivo, hace pocos meses se ha construido un estudio en su propia casa.   Está influenciada por grandes divas como Gloria Stefan, Mariah Carey, Lauryn Hill, Whitney Houston y Céline Dion. Además, se adapta a varios estilos musicales al haber escuchado desde Rap & Black hasta Hard Rock pasando por boleros.   Jason Core conoció a Sandry Sanz gracias a su marido (de ella), que era compañero de trabajo (de él). En ese momento, Jason Core se encontraba buscando una voz femenina desesperadamente, algo complicado en España donde la música electrónica no es la preferencia del público y, en consecuencia, de los cantantes. Sandry Sanz hizo una prueba con un tema de Jason Core y fue cuando quedó prendado de su potencia vocal, su afinación, su dominio del tempo y su adaptabilidad a cualquier género, dándole siempre su toque personal y aportando ideas vocales geniales.